El 15M, aunque transformado, madurado, sigue con muy buena salud como han indicado recientemente las estadísticas que apuntan a una amplia mayoría ciudadana que simpatiza con este movimiento y expresan una mayor confianza en las movilizaciones ciudadanas que en la capacidad del gobierno para resolver los problemas de la ciudadanía. Sin embargo, a pesar del deseo vivo de una mayor democracia en la sociedad, no sé ve cuál es la forma por la que se puede romper el bloqueo político que impide que se ponga una solución a las necesidades urgentes que las actuales políticas de gestión de la crisis están generando.
En esta situación surgen numerosas personas e iniciativas que proponen que la solución a este problema pasa por conseguir primero la unidad de la izquierda. Así, la únca opción para romper el bipartidismo pasaría porque todos aquellos que se consideran de izquierdas confluyesen en una unica iniciativa política que pudiera conseguir apoyo suficiente.
Desde nuestro punto de vista esta posición simplemente no es útil. Por un lado es falso que haya un consenso político que permita la unidad de la izquierda. Con esto nos referimos a que en la izquierda que se llama a la unidad no hay un consenso sobre qué hacer, no hay una apuesta política común. No es lo mismo buscar formar un gobierno nuevo de izquierdas en el actual marco político que impulsar un proceso constituyente o una revolución democrática a partir de la constatación del agotamiento del ciclo político que comenzó en el 78. Desde nuestro punto de vista, es necesario hablar de organización y de estrategia para derrocar a este gobierno ilegítimo, pero a este régimen también, sin someterse a ningún tipo de chantaje de unidad con organizaciones conservadoras
Por otro lado pensamos que este enfoque es reduccionista porque deja fuera a muchísima gente que está en contra del bipartidismo. Entender la conflictividad social que vivimos sólo en términos de derecha e izquierda es extremadamente simplista. Experiencias como la PAH o las mareas consiguen unificar sin hacer ese llamamiento a la unidad de la izquierda. Por otro lado, gran parte de las experiencias de auto-organización y acción más exitosas desde el 15M (la campaña Stop Desahucios, 25S Rodea el Congreso, 15MpaRato, por nombrar unas pocas) no han partido desde un enfoque de unidad sino como proyectos que avanzan de forma independiente y ganan terreno abriendo nuevos frentes de lucha sin pararse a buscar un consenso unitario.
Más allá de la unidad: explorando horizontes políticos no totalizadores
En el fondo, para nosotras, el problema no está tanto en la unidad como en el discurso que fue construido sobre ella. Fue construido porque se trata en realidad de un problema viejo como el siglo que ya abandonamos. En el fondo, lo que plantea la idea de la unidad de la izquierda es que todo el mundo entiende por izquierda y derecha lo mismo que nosotros. Que no vivimos en mundos múltiples donde las palabras construyen a su vez mundos diferentes. Que las palabras no están cargadas semánticamente con significados que no controlamos, pero que habitamos igualmente. También que la etiqueta «de izquierdas» no supone un límite para encontrarse con otras que son como tú, pero habitan imagenes diferentes de sí mismos y del mundo.
No son los contenidos del universo político de quienes se autodenominan como la izquierda lo que está en declive. Más bien, sucede todo lo contrario, nunca en décadas ha habido un consenso tan amplio sobre la necesidad de radicalizar la democracia, los derechos sociales y políticos. Lo que está en declive es el imaginario clásico de izquierdas. La autorepresentación y la identidad de izquierdas clásica funciona como una frontera que deja fuera y se aisla respecto del mundo que la rodea.
En este sentido, el discurso de la unidad es también siempre el espacio de un chantaje. Un chantaje sobre lo que podría ser hecho, de autolimitación, de frontera, de límite. El problema, como en todo discurso, no es lo que dice. El problema es lo que el discurso hace: capturar todo lo que podría ser dicho y reconducirlo hacia un lugar reconocible de antemano. No discutimos el discurso de la unidad. Porque el discurso de la unidad no es discutible. No hay discusión posible. Todo esta ya dicho. Un escenario así no nos sirve como punto de partida.
Al contrario, creemos en hacer, en probar, en inventar. Creemos también en corregir, en echar marcha atrás, cuando y si hace falta. Creemos en compartir y sumar, pero también en aceptar la ruptura. El punto donde hace falta construir caminos que no por ser diferentes, no son paralelos, y no por ser otros, no implican amor o respeto. Creemos que lo uno cree que debe ser hecho no significa lo que uno cree que debe hacer. Creemos en el amor libre. Que el amor que nos sentimos no debería ser nunca un límite o un condicionante acerca de lo que otra puede hacer.
Creemos en estar juntas. Pero hemos aprendido que estar juntas no significa siempre ser lo mismo, hacer lo mismo o someterse a la voluntad del otro. Llevamos dos años organizándonos masivamente sin necesidad de etiquetas ideológicas cerradas, encontrándonos incluso con aliados inesperados. Nos hemos coordinado en momentos clave para golpear mortalmente a un régimen que se tambalea. Han perdido la calle, han perdido las redes y han perdido la opinión pública. Ya tenemos la unidad, somos el 99%, no estamos sólo quienes nos etiquetamos como la izquierda.
Somos muchísimas personas diferentes juntas quienes luchamos porque estamos afectadas por las mismas cosas, nos oprimen los mismos enemigos, y porque vivimos un mundo común que producimos. Y vamos a echarles. Pero para eso tenemos que darnos cuenta de que la izquierda es sólo una parte de una respuesta social mucho más compleja y difusa. Componiendo un espacio multicolor, diverso y distribuido, siguiendo el ejemplo de experiencias organizativas como la PAH pero extendido a otros frentes y a otros niveles, con un alto grado de conflicto con el poder y también una elevada capacidad de resolver la situación urgente de miles de ciudadanos, habremos ganado.
26/05/2013
@PinkNoiseRev
(A Zofra es un espacio de discusión, no tiene por tanto una única opinión sobre los asuntos que se tratan)
Blas de Lezo
May 26, 2013
Bien, no somos las izquierdas contra las derechas, somos el 99% contra la codicia del 1%
UNETE Y VENCEREMOS
http://clearrevolution.blogspot.com.es/2013/05/unete-y-venceras.html
alterglobalizacion
May 26, 2013
Estoy de acuerdo.
Aunque yo lo expresaríacon otras palabras y enfoque (http://alterglobalizacion.wordpress.com/2012/11/07/izquierdas-y-derechas-en-la-centralidad-capitalista/) comparto la insuficiencia de la etiqueta «la izquierda» como palanca para un cambio profundo y de largo alcance, que es el que necesitamos. Saludos cordiales.
Pepe Estoy Indignado
May 26, 2013
Vuestro texto parte de varios supuestos que creo no tienen base, pero muy comprensibles como los supuestos que desde algunas gentes de espacios partidistas se adjudican al 15M. De hecho algunas gentes en ambos lados empiezan por compartir la categorización, fácilmente falsable, del espacio 15M y el espacio de los partidos como separados e inmiscibles.
Son supuestos que se basan en la presunción de lo que el otro lado piensa y elabora sin conocerlo, porque para empezar se supone al otro lado como univoco y cohesionado, y se le adjudican procesos y construcciones que en realidad responden a lo que unx cree que elaboraría el sujeto que imagina.
Y en ambos caso es muy cansado desmontar lenguajes que resultan insultants para unxs y otrxs, pero en ello estamos.
Por partes:
– Cierto, no está escrito aún el consenso sobre el qué hacer en la izquierda, como tampoco lo estaba entre quienes acamparon el 15M, ni lo está en las mareas: no necesitaríamos miles de horas de debates entre unxs y otrxs si lo hubiera estado. Desde luego no esta escrito cuál es el consenso sobre cómo se va a impulsar un proceso constituyente o una revolución democrática a partir de la constatación del agotamiento del ciclo político que comenzó en el 78. He de suponer que habréis leído los muchísimos textos, declaraciones y propuestas neoconstituyentes y de cambio de régimen que llevan muchos meses (y en algunos casos muchos años) saliendo de personas muy conocidas de Izquierda Anticapitalista, del entorno de la izquierda independentista, de la propia Izquierda Unida… muchas de ellas muy activas en los movimientos que se vienen considerando parte o secuelas del 15M y que nombráis, como la campaña Stop Desahucios, 25S Rodea el Congreso, o las propias mareas. Por tanto, imagino que vuestra objeción es a partir del enfoque de unidad para lograrlo. ¿Y qué son las mareas o stop desahucios sino experiencias evidentes de unidad de acción? Que esa unidad de acción no partiera de las organizaciones previamente existentes, sino que las atravesara, no indica que tal unidad fuera superflua, sino precisamente que su necesidad se vivía tan intensamente que supero la capacidad de articularla por parte de lo preexistente, encorsetado en sus propias estructuras y en un estado de las cosas que se acabó. Cierto, tal unidad no se está generando “por arriba” en base a “decretar” una unificación de lo preexistente, sino que se va construyendo en la práctica, (incluyendo también a muchas personas que mantienen su militancia en estructuras previas) por cierto no sin grandes carencias que cualquiera que participe en las luchas de los 2 últimos años conoce.
Entre tales carencias, quizá de cierta importancia, está la de la inexistencia de un discurso y una práctica mínimamente articuladas para el derribo del régimen más allá de las luchas sectoriales o los grandes principios o las grandes frases triunfalistas.
-La “unidad” de la izquierda puede representar lo que queramos, efectivamente es un concepto que ha tenido usos muy dispares, tantos como el asamblearismo o la horizontalidad. Por eso, y mientras también se devalúa, preferimos emplear el de confluencia, porque no implica subsumirse, disolverse o integrarse, sino caminar y construir juntxs cuando es útil hacerlo, y ser capaces de ir decidiendo si para ese camino o esa construcción necesitamos tandems, tetratandems o solo pasarnos los relevos, pero también que levantar algunas piedras es posible entre cien a la vez y ridículamente imposible si diezmil empujan en momentos distintos.
En el discurso de la unidad no lo sé, pero en el de la confluencia, desde luego, no todo esta escrito ni funciona ningún chantaje, ninguna captura,… ¿de donde sale todo eso salvo de vuestro prejuicio?¿cual es el chantaje?¿Que os hace sentiros atacadxs de tal manera? ¿Es que alguien os obliga a confluir? ¿Se puede acusar de chantaje, o de imponer límites, a quien os pide que expreséis cómo mejorar la sinergia?
Lo que sigue sin explicarse en vuestro discurso es cuál es la mancha inaceptable, la senda monstruosa que sí está en afrontar tambien la coordinación en el plano electoral pero no en el movilizador. ¿Cuál es el chantaje en Intercolectivos?¿Y en Marea ciudadana? ¿O en cualquier de los ámbitos en los que llevamos muchísimos años (muchos mas que dos) organizándonos y coordinándonos masivamente? ¿Las asociaciones de vecinos caen en el chantaje cuando se federan? ¿Las asambleas de centros educativos deberian eludir el chantaje de acudir a marea verde a coordinar acciones?
-Sí, somos muchxs quienes luchamos, y debemos a apelar también a quienes no se reconocen como de izquierdas, o feministas, o antifascistas, o antihomofóbicxs… pero, aparte de la obviedad de que debemos ser capaces de comunicar sin que tales palabras asusten, hemos de dejar de utilizarlas? ¿cada vez que se consiga desprestigiarlas desde el poder hemos de abandonarlas y correr a buscar nuevos términos hasta que también nos las roben?¿todas? Al final tendremos que utilizar diez paginas para explicar lo que es el antirracismo porque decir anti- es etiquetador y excluyente? Bien, quizá lleguemos a hacerlo si creeis que es necesario, aunque estaría bien que repensáramos un poco que espacio cedemos al poder con ello, y en que medida es un éxito y una derrota (quiza a la vez) abandonar términos que el poder lleva siglos desprestigiando y vapuleando. Por el momento algunxs decimos confluencia de la izquierda y desde abajo porque tampoco nos creemos con derecho a que se sientan borradas –y por tanto excluidas- miles de personas que han dado sus vidas por lo que hoy otros nos roban. Y no por justicia poética o sentimentalismo, sino porque también con ellas (que hicieron mucho en el pasado) y sus organizaciones sentimos que hay que construir el futuro.
Porque al fin es de eso de lo que se trata. La PAH, donde por cierto llevan mucho curro y muchas ostias gente autoetiquetada en organizaciones “del siglo pasado” lo curra de una manera, y sería absurdo que la acusáramos de chantajearnos por apelar a nuestra responsabilidad como ciudadanxs para participar en los escraches o los piquetes antidesahucios. Como pasa en las otras muchas luchas es las que nos encontramos a diario.
Y en otros espacios, como el electoral, hay otras cosas que hacer.
O eso pensamos quienes creemos que , por mucho que digamos que “en el futuro ya hemos ganado” no saltamos de repente al año 2200. Quienes vemos que lo de que el régimen se tambalea no significa que no sea capaz de reinventarse a sí mismo estabilizándose a niveles de miseria que aún no conocemos, como lo ha hecho muchas veces en muchas partes del mundo. Que hay una ventana de oportunidad histórica que no se alargará indefinidamente porque la resistencia de la población no crece indefinidamente con su saqueo, porque puede ser doblegada, porque no es cierto eternamente que “cuanto peor, mejor”, porque además de la muy temible UPyD, Ciutadans o tecnócratas variados existen espitas populistas y fascistas para la olla a presión en la que vivimos. Que podemos ser el 99% (muy simplificadamente, porque hay muchos privilegios deben acabarse además de los del 1%), pero que estemos todos los días en la calle no significa ni remotamente que sea nuestra.
Y que sí, hay elevada abstención y desafección a “los políticos”…perfectamente asumible por el régimen como USA lleva un siglo demostrando, y un núcleo duro de ciudadanxs que ni en nuestros mejores sueños que jamás dejaran de votar al UPPyDSOE y a las derechas periféricas. Y hay países donde se están viviendo procesos de cambio real de estructuras con fuertes movimientos populares… y procesos de confluencia en lo electoral.
Así que, claro está, cada cual sabrá donde invierte más a gusto o cree más rentable su esfuerzo pero no hace falta que dibujemos una realidad a medida para justificarlo ni sobre todo, que acusemos a los demás de chantaje para no sentirnos cuestionadxs.
Muchxs mantenemos nuestros espacios de lucha a veces 100% autónomamente, a veces 100% coordinadxs, y la mayoría de las veces en algun punto intermedio. Y muchxs debatiremos sobre las distintas posibilidades de confluencia a partir de nuestras realidades el 15 y 16 de junio en la Convención 3D en el Centro Civico Tío Jorge de Zaragoza: podéis ver las cuestiones que hemos propuesto debatir en 3daragon.org/aportaciones, y hacer vuestras propuestas en aportaciones@3daragon.org
Pero no creemos que nadie nos chantajee si prefiere dedicar su tiempo o esfuerzo a luchar de otra manera.
Salud y confluencia en lo que se quiera: el amor si es libre no se siente culpable. No?
Juan Blanchard
May 29, 2013
Espero que no se ofenda tu libertad de expresión, pero meter en un foro parrafadas como esta me parece un abuso. Si encima me lo leo desde el movil, se convierte en una tortura.
Mezclas muchas cosas diferentes interesadamente. Llamalo confluencia, si quieres, pero la formula no es muy nueva, es la enésima apuesta electoral aprovechando un momento de mayor movilización y la coyuntura de otros exitos, como Syriza (que ahora pacta con la derecha nacionalista y traiciona huelgas de profesorado).
Me parece genial que hagais coaliciones electorales, buscando fórmulas de inclusión de movimientos sociales, pero no a todo el mundo le parece positivo para el futuro de los movimientos. pero no deberíais callar a los que opinan así, con parrafadas en los foros.
Román
May 27, 2013
Muy probablemente no es el 15M el que tiene muy buena salud si no las demandas y el malestar social. Existe una resaca en la movilización social por diferentes motivos pero se detecta un cansancio si no existen alternativas reales que puedan cambiar el sentido de las políticas de agresión contra las de abajo. Este tipo de reflexión no tiene en cuenta que un proceso de desmovilización es posible. Sería una irresponsabilidad de magnitud histórica no explorar nuevas vías que las que se llevan intentando desde hace 2 años, no que las monopolice si no que las complemente abriendo nuevas posibilidades.
Desde Ateneo o desde otros lugares donde se busca la unidad de la izquierda, y por cierto más bien unidad de acción no de discurso, nunca se ha cerrado la puerta a que el enemigo no sólo es el gobierno, si no también el Régimen del 78. Otra cosa es que durante el debate puedan surgir propuestas que tácticamente nos interese ir a por el gobierno para quitar un puntal más del Régimen o dejar al Régimen agarrado a este gobierno en una posición tan frágil. No sé de dónde se han sacado los miembros de PinkNoiseRev que la unidad de la izquierda convoca sólo para derribar a este gobierno. La unidad de acción de la izquierda es un proceso abierto, ilusionante para muchas, para nada cerrado donde el debate va a ser intenso y sobre la mesa se van a poner muchas cuestiones. El mostrarlo o percibirlo como un bloque monolítico es otro error tan grande como verlo como un proceso cerrado.
Hay un error por desconocimiento del proceso. La unidad de la izquierda será en torno a unos objetivos, abriendo frentes de lucha, o tal unidad no será. Si no, esa unidad de la izquierda hace muchos años que existiría ya que simplemente habría que convocarla como un conjuro. La izquierda no es un grupo de zombis que acuden a la voz de la unidad. La izquierda es un grupo muy heterogeneo que sólo podrá avanzar abriendo frentes de lucha y a la conquista de nuevos derechos, si no, no será.
De ahí tiene tanta importancia trabajar sobre objetivos, con ellos las personas se pueden identificar si son compartidos. Es un problema político no semántico.
Insisto en el error tran grave de análisis al considerar que la izquierda somos un grupo de zopencos que no analizan, que no debaten, que no intentan reinventarse. A pesar de que tengamos y no rechacemos ni mucho menos una tradición de más de un siglo de luchas, por cierto en el que más se ha avanzado en la conquista de derechos y libertades. Si eso es lo que echa para atrás, quizá se debe más a un tema de desconocimiento de la historia, o un tema de hegemonía. Para otros “el mundo” comenzó el 15 de mayo de 2011, nadie les niega el derecho a buscar su identidad.
Vamos a probar, a inventar y en corregir. Insisto que la unidad de la izquierda no es una verdad inmutable. La izquierda tampoco es igual después del 15M, no es o no debe estar en un frasco aislado.
Según lo que se desprende del texto debemos etiquetarnos unicamente como 15M renunciando a una tradición de décadas de luchas. Algunas acertadas y otras fracasadas, con debates y luchas que han marcado la historia del pensamiento y de la humanidad, porque no creemos que los derechos hasta ahora disfrtados los escribió Dios con letra pequeña en las tablas de la ley, etc.
Sin esa acumulación de experiencias que también han sido vertidas en el 15M a través de miles de militantes que se incorporaron en las plazas, el 15M probablemente no habría pasado de un sueño de primavera. Ya es hora que la izquierda reivindiquemos también nuestra contribución al 15M. Es decir, ni el 15M se puede entender sin la izquierda, ni la izquierda actual se debería poder explicar sin el 15M.
Personalmente me gustaría saber quienes son esas otras partes en la protesta social que no son la izquierda. Por que la izquierda es también un término ámplio. Tengo la impresión que en algunos momentos del texto hablan de que la izquierda es algo muy amplio (cuando dicen que su significado es muy amplio para la unidad) y por otro lado al mismo tiempo dan una visión como un bloque monolítico, con unos límites muy estrechos. Pero al mismo tiempo firmo palabra por palabra desde donde dice “componiendo un espacio multicolor,….”
alterglobalizacion
May 27, 2013
Pienso que el problema está en la etiqueta. Llamadlo márketing si queréis. El término «la izquierda» por una simple cuestión de formalidad geométrica divide a la sociedad justo por la mitad y dividir siempre es funcional al poder. No nos basta con el 50% de la población. Hay que fabricar un símbolo, una bandera, una etiqueta en la que pueda verse reflejado el 90% de la población. Desde el punto de vista del márketing o incluso, en un sentido más amplio, desde la Sociología política pienso que con esa etiqueta siempre nos vamos a quedar lejos del objetivo necesario para conseguir un auténtico vuelco en el equilibrio de fuerzas actual entre clases sociales. Me parece más certero y útil el mensaje 15M de «No son izquierdas y derechas, son los de arriba contra los de abajo» o el del movimiento occupy, «we are de 99%», en la misma linea. Por cierto… ¿en cual de sus obras dijeron Marx o Bakunin que ellos fueran de izquierdas?. No las encontraréis. Ellos se hubiesen reído de esa etiqueta al igual que Lenin o Kropotkin. Esa etiqueta se queda pequeña para la envergadura del reto al que nos enfrentamos como civilización humana. El problema es el capitalismo, no la derecha. Es hora de inventar nuevas etiquetas. Saludos cordiales.
you cheser
junio 3, 2013
coincido con el final de tu comentario, el capitalismo desaforado fagocita la derecha la izquierda el centro y todo lo demas.
ProPolis
May 28, 2013
Gracias por un debate que continuamos aquí, recogiendo textos de este espacio.
http://propolis-colmena.blogspot.com.es/2013/05/mas-alla-de-la-izquierda-y-la-revolucion.html
Psyco
May 28, 2013
La verdad que como discurso está muy bien. Pero unidad no es lo que yo veo en la gente. Cada dia, sale un colectivo diferente a reivindicar lo suyo, y al resto que le vayan dando. Ojala y ese 99% estuvieramos unidos (aunque eso de que han perdido la opinión pública es más ideal que real) pero muchos dias uno se desanima comprobando el egoismo de otros, que se quejan de que nadie les ayuda, y no ayudan a nadie. Ese tipo de unidad se llama egoismo y no lleva a ningún lado. Mientras no cambien los valores y hablemos de empatia, dejemos el miedo, y seamos proactivos, será muy dificil encauzar en un mismo camino a tanta gente divergente.
Creo que la unidad no debe definirse en izquierda o derecha, si no en si quieres cambiar las cosas o no. Y luego una vez que se estén cambiando, vamos decidiendo la lateralización entre todos.
Pepe Estoy Indignado
May 28, 2013
Muy cierto que al dirigirse a toda la poblacion hay que buscar las tacticas de comunicacion mas adecuadas, no nos podemos limitar a convocar a la izquierda ni al 15M, porque hay gente que se siente fuera de ambas etiquetas y porque ambas pueden significar mucho y nada. Por ejemplo: hemos de construir un lenguaje que atraiga a votantes desengañadxs del PSOE sin hacerle el trabajo al PSOE, culpable en gran medida del deterioro de la etiqueta «izquierda». Pero tambien debemos evitar a toda costa que ese lenguaje facilite las cosas a UPyD/ADRYs y tecnócratas y fascistas con nuevos ropajes, que ven una ocasion de oro en las criticas «equidistantes»a «la izquierda y la derecha». Y no es un miedo teorico sino empirico: circula una avalancha de todo tipo de memes, post, webs, foros y mails en los que se aprovecha la critica a «los politicos» y «la izquierda y la derecha» para transmitir en unos casos neoliberalismo y en otros fascismo.
Construir un lenguaje que no sea aprovechado por el PSOE ni por fascistas o neoliberales habra de hacerse con las aportaciones de quienes mantienen su «etiqueta» de izquierda y quienes prefieren utilizar la «etiqueta» previa -y ahora reutilizada- de «lxs de abajo». A eso ayudara que unxs y otrxs asumamos las carencias y riesgos de nuestras respectivas «etiquetas». Algunas de esas carencias y riesgos son los que señalo al recordar el posible aprovechamiento por parte del fascismo del rechazo al termino izquierda, que no a sus contenidos, sin llamar por ello fascistas a quienes ven limitante en comunicacion el uso de tal termino.
Pero tambien querría que no se me llamara «chantajista» por creer en la necesidad de que trabajemos por la confluencia de la izquierda y de quienes prefieren autoetiquetarse de otra manera pero perciben enemigos comunes y posibilidades de estrategias comunes.
Pepe Estoy Indignado
May 28, 2013
Mira por donde, el primer comentario a vuestro articulo ha resultado un ejemplo perfecto de a lo que me referia. Contiene, tras un » no somos las izquierdas contra las derechas, somos el 99% contra la codicia del 1%», un enlace a un blog donde leemos, entre imágenes metiendo a IU y a Amaiur en el mismo saco que al PP, por ejemplo joyas como esta:
«Libertad de los padres para decidir el tipo de educación que dan a sus hijos, libertad para decidir cómo emplear la parte de dinero de presupuesto público correspondiente a la educación. Que el Estado decida por encima de los padres es totalitario.»
Es decir, conciertos educativos y cheque escolar a tutiplen: neoliberalismo en envoltorio revolucionario.
O estas:
«No hace falta atacar a la iglesia y al rey dentro del 15M. Hay muchos foros y asociaciones donde revindicar estos temas que claramente dividen al 99%»
«Querer unir al 99% atacando sólo a políticos del PP es incoherente, hay que combatir a todos los políticos sin excepción»
«Dispersar los esfuerzos en ecologísmos, antimilitarismos, alimentación, antitaurinos, etc, nos debilita y muchas veces nos divide»
Este es el grave riesgo que tiene la critica equidistante de izquierda y derecha: estaria bien saber cuantas visitas ha captado esta pagina nefasta a traves de vuestro articulo, y cuantos reenvios de su basura se han hecho a continuacion. Sé que no es vuestra responsabilidad, pero hay que tener muy presentes estas cosas cuando se escribe, no sólo si a cierto público le causa rechazo la etiqueta «izquierda»
timocreonte
May 28, 2013
Teaser de próximos artículos:
«El discurso de la unidad: fantasmas»
Fantasma 03. Alimentar el fascismo/neo liberalismo/revisionismo/inserte aquí el enemigo que considere conveniente. No conmigo es contra mí.
Pepe Estoy Indignado
May 28, 2013
Siento si alguien ha interpretado que dijera que alimenta al fascismo. Creo que lo hemos dicho suficientemente, pero por si no queda claro, aqui está: no estar currando conmigo no es estar contra mí. Hay suficiente curro en suficientes áreas para todxs.
No pedimos nada más que se sea consciente de las propias debilidades y riesgos.
Quienes curramos por la confluencia desde abajo y de la izquierda somos conscientes del riesgo de que algunxs se espanten por la sola mención o presencia de partidos, riesgo que asumimos, porque entendemos que vale la pena y que del trabajo común de gente que está en partidos y de gente refractaria a ellos puede crearse un lenguaje común que construya esa confluencia, como da cuenta, por ejemplo, el hecho de que en proyectos como la Convención 3D Aragon estén codo a codo con gente de partidos activistas que antes han sido muy reacios a ellos. También sabemos que, para muchas personas cuya referencia de los términos izquierda y derecha son los grandes medios, corremos el riesgo de que se confunda la izquierda con el PSOE, con lo cual estaríamos (sí, mea culpa) favoreciendo que el PSOE se «alimentara» de nuestro trabajo. Y por eso creemos importante recibir aportaciones que creen ese discurso diferenciado, que ya marcamos al posicionarnos contra la Deuda, pero que habrá de completarse, y fundamental demostrarlo con una practica y una critica coherentes contra el PSOE, que no contra sus votantes.
Y de esa misma forma creemos que debemos señalar riesgos y debilidades de los discursos que equiparan a la izquierda y la derecha o que se quedan en el «democracia y punto» sin cuestionar explícitamente el capitalismo que ha generado la ficción de democracia que tenemos, y que con más o menos dificultades podría adaptarse y sacar partido también a una ciberdemocracia participativa «y punto». No hacer un cuestionamiento explicito y continuo del problema de sistema económico de fondo, lo que viene a ser central en el discurso de lo que venía llamándose izquierda, es la condición no imprescindible pero sí aprovechable por otrxs para alimentar su discurso fascista o neoliberal. Nos guste o no, es lo que han venido haciendo metódicamente partidos como UPyD o Ciutadans o lo que hacen blogs como el del primer comentario.
A partir de esa conciencia de las carencias, limitaciones y riesgos de cada vía, podemos seguir currando cada cual en el flanco que veamos mas necesario. Pero hemos de ser también conscientes de que necesitamos la fuerza de la mayoría social, sea en la calle como en las urnas, para dar la vuelta a la situación. Por separado, ni desde los partidos de la izquierda ni desde fuera de ellos se puede acumular la fuerza necesaria, ni mucho menos compitiendo entre sí. Podemos, eso sí, elucubrar indefinidamente sobre cómo podría haber sido posible hacerlo si lxs otrxs se hubieran unido a mí. Pero con elucubraciones no se cambiará la Constitución del 78, ni se derogara la reforma laboral o se blindarán los servicios públicos y los derechos. Con todos sus errores, carencias y dificultades, es lo que
Sólo buscando las sinergias entre todxs podremos hacerlo, y sólo proponemos sentarnos a hablarlo.
Es posible, y con todos sus errores, carencias y dificultades, es como se empezó a hacer hace años, por ejemplo, en los procesos de profunda transformación que viven hoy varios países de América Latina
Y alguna vez habrá de ser en persona; nosotrxs hemos propuesto que quienes luchan en Aragón por conseguir verdadera Democracia para defender los Derechos frente a la Deuda lo debatamos el 15 y 16 de junio en el Centro Civico Tío Jorge de Zaragoza. No «chantajeamos» a nadie para que participe, pero por supuesto defendemos y argumentamos desde la convicción la convocatoria, como cada cual argumenta y defiende lo que hace.Y no nos importa ser quien se equivoque en el momento o la metodología: alguien le tiene que poner el cascabel a este gato.
tururú
May 28, 2013
«estaria bien saber cuantas visitas ha captado esta pagina nefasta a traves de vuestro articulo, y cuantos reenvios de su basura se han hecho a continuacion»
Flipo con esto. Entonces lo que pasa es que la gente es tonta y mejor que darle más puntos de vista para que piense, compare y elija es mejor tener un mensaje unificado?
Pepe Estoy Indignado
May 28, 2013
No,no digo que la gente sea tonta. Ni nadie dice que sea malo que haya varios puntos de vista, donde has leido tal cosa? Precisamente es lo que estamos haciendo, dar mas puntos de vista.
Lo cual no significa que no debamos ser capaces de reconocer las posibles derivas y riesgos de nuestros mensajes.
Vuelvo a decir que soy el primero en reconocer que hablar de «la izquierda» sin más dando por supuesto que lxs demás entienden por izquierda lo mismo que yo sería un error. Ese es el riesgo que reconozco en perder de vista la posición del oyente/lector en mi caso, y lo reconozco porque me parece lo honesto intelectualmente.
Y señalo, porque también me parece honesto intelectualmente reconocerlo, que llamar «chantaje de unidad con organizaciones conservadoras» a los procesos de confluencia en marcha, además de ser profundamente erróneo (y ofensivo para quien aún no tenga suficiente callo), puede ser utilizado, y de hecho lo es, por actores políticos muy distintos de quienes firman el artículo, porque como el mismo texto subraya «las palabras están cargadas semánticamente con significados que no controlamos, pero que habitamos igualmente». Si esta advertencia sirve para prevenirnos en el uso del termino «la izquierda», creo que no es nada abusivo defender que deberia prevenirnos también sobre el efecto evidentemente descalificador que puede tener la expresion «unidad con organizaciones conservadoras». Efecto descalificador que cualquier ciberfascista sería muy idiota en no utilizar para acusar de «conservadorxs» a quienes promueven tales procesos de confluencia pintándose por contraste de revolucionario.
Como hace, tal cual, el blog enlazado en el primer comentario.
tururú
May 29, 2013
Vaya, de la necesidad de la unidad de la izquierda habla mucha gente, desde el PSOE, UGT, IU hasta colectivos de base. No podemos negar que ese imaginario también es utilizado desde organizaciones conservadoras que poco van a hacer por desmantelar el régimen actual. Por eso hay que ir más allá.
you cheser
junio 3, 2013
tienes razón, 10 millones de votantes del pp no pueden ser todos fascistas radicales.
you cheser
junio 3, 2013
por lo que sé, teneis toda la razón, millones de personas, ciudadanos de la derecha democrática, también estan en contra de esta ultraderecha fascista y nazional socialista, estos millones de ciudadanos tienen mucho más en común con la izquierda moderada que con la derecha radical y excluyente.
luciano medianero morales
junio 13, 2013
los popes de la izquierda socialimperialista: Mafiosos prepotentes, esos popes y los que les siguen, saben lo que hay, igual que con los jóvenes del partido popular, las Nuevas Generaciones. Estos partidos son organizaciones piramidales, se acuerdan de las mafias y estafas piramidales, que son hoy en día las preferentes, las hipotecas,…Hace años que decía respecto a la cuestión de los partidos y las votaciones: que todo el personal sabía de que iba la cosa, y los que votaban y daban coberturas son tan culpables como los que están en las cúspides, las élites económicas-políticas-ideológicas,…Las izquierdas sociales de antes y ahora se unen los indignados, los m15m,…es más de lo mismo,…son aliados pragmáticos de las izquierdas institucionales, son los cachorros que proyectan y activan arribismos,…me entienden verdad,…¡¡?. DE TODAS FORMAS HAY QUE SEGUIR DANDO POR SACO, HAY QUECONSEGUIR COSAS, HAY QUE RESISTIR A LOS PODERES, HAY QUE UNIRSE Y LUCHAR INTERNACIONALMENTE CONTRA ESE PODER GLOBAL CAPIIMPERIALISTA, A ESE SISTEMA MUNDIAL DE PODER PLUTOCRÁTICO, ESE PODER ESTATAL GLOBAL QUE ES LA ONU-OTAN,…CON SUS DIVERSOS ORGANISMOS PUBLICOS Y PRIVADOS,…LUCHANDO SE ESTÁN CONSIGUIENDO COSAS, PERO COSAS EN FUNCIÓN DE LO QUE SE HA PERDIDO,…PERO AL FINAL SIGUE GANANDO EL CAPITAL,…LO QUE PARECE QUE DAN POR OTRO LADO LO CONSIGUEN,…¡¡.HAY QUE DERROTAR AL PODER ESTATAL, PANEUROPEO, GLOBAL,,,LO EMAS ES IR CUESTA ABAJO. HAY QUE SEGUIR REFLEXIONANDO, ORGANIZANDO, SABIENDO ESTRATEGIAS,…POR ELLO SI QUEREIS OS INFORMO DEL BLOG: lukyrh.blogspot.com, donde se publican temas sobre estos asuntos que nos trae en la lucha de clases,…
dando las gracias de antemano, esperando respuestas.lukymlg@gmail.com
* Para el 23 de junio, hay proyectado unas luchas permanentes de desempleados,…informado por el colectivo nadie sin nada/blog,…quisiera saber vuestras opiniones.
Joan
junio 25, 2013
El dilema del 1-99% es falso, porque en el 99% la gran mayoría de población que no tiene consciencia de serlo, ni quiere tenerla . Se pueden aplicar conceptos clásicos como la alienación, considerar a esas personas como lumpen, pero lo cierto es tanto ahora, como anteriormente durante el franquismo unos miles han luchado por los derechos de millones. Eso precisamente es ser «de izquierdas», o llamadlo X si no os gusta esa denominación.Los debates planteados por los movimientos sociales seran capitalizados por alguna formación política (que quizá ni existe) se insitucionalizarán (como pasó con los movimientos sociales de la transición) y si consiguen gobernar aplicarán en parte y finalmente traicionarán muchos otros.Entonces habrá que volver a la calle a construir nuevos paradigmas…
exdar
julio 2, 2013
La izquierda y la derecha , las ideologías,los sistemas políticos inventados estos últimos dos mil años fueron un fracaso.La única realidad es que la clase dominante el 99% ha ganado todas las batallas sociales , su concepción de la sociedad es la victoriosa, porque hasta ahora no había manera de coordinar al 99%. Pero la era digital esta cambiando ese paradigma, ya que el 99% ahora puede coordinarse casi al instante; impulsando de nuevo la lucha de clases, pero esta vez de manera masiva y mundial, los símbolos de la coordinación aparecen en todo el mundo , la máscara de fawkes , mas democracia y poder de decisión para el pueblo. Estamos ante una evolución social, política y jurídica mundial; solo comparable a la que impulsaron, la invención de la escritura o la de la imprenta.Para profundizar más el tema os recomiendo leer Michel Serres y su ultimo trabajo Petite poucette. Todo esta obsoleto, todo esta por hacer e inventar, así que manos a la obra «Petite poucette» .
Rafael
julio 6, 2014
¿Por qué tipo de cambio luchan los pueblos del Estado español?
El título del artículo del 15M es tan evocador («Pensar y actuar más allá de la unidad de la izquierda»… ), que da hasta escalofrío. En efecto. ¿Cómo es posible criticar la acción por la unidad de clase -como hace el artículo- y reivindicar la unidad con organismos conservadores? Así pues, para los autores del artículo, el concepto ‘lucha de clases’ ya no existe, o es caduco, ya que consideran que analizar la situación del país en términos de «derecha e izquierda es extremadamente simplista». ¿Nos podrían explicar entonces cuál es la naturaleza política de la Troika (FMI-BCE-UE)? Claro que para los «dirigentes» del 15M, este tipo de referencia internacional posiblemente les moleste. Reduzcámoslo pues, y formulemos la pregunta en los límites de nuestra orgulllosa «piel de toro»: ¿Acaso la monarquía y su gobierno -expresión institucional del capitalismo español- no son la «derecha»? El hecho de que las direcciones de los partidos de «izquierda» sean aliados objetivos de este sistema dominado por la burguesía, no transforma en burgueses a los militantes y trabajadores que depositan su confianza en estos partidos. Sin embargo, los autores de este aberrante artículo prefieren una unidad interclasista, a la unidad de un frente de clase… Que se equivoquen, o que sea su línea estratégica, es el problema de ellos. Pero no se puede aceptar que semejante actitud conduzca al pueblo, una vez más, a un callejón sin salida.